De lo malo malo, lo mejor.

Pasaron 3 semanas desde que pise por primera vez la isla y mis dudas no desaparecían en torno a si mantendría el ritmo de entrenamiento o por el contrario lo bajaría, pero nunca pensé en dejarlo, creo que eso es una de las cosas que he aprendido con los entrenadores y compañeros que tenía en Madrid, y es que nunca hay que rendirse, ese es el verdadero fracaso y esa palabra no tiene que existir en nuestro vocabulario si es que de verdad queremos llegar a algo en esta vida.

Después de la primera semana encontré una pista de atletismo totalmente gratuita, y mis ojos se iluminaron tanto como los de los conejos cuando enciendes la luz del coche, ya que estas dos siguientes semanas tocaba mucha pista porque teníamos test, así que aunque tuviera que coger 4 autobuses para poder hacer el entrenamiento completo pensé que quien algo quiere, algo le cuesta.

Llegaba sobre las 09:30 de la mañana y el termómetro de la pista ya marcaba más de 32º, pero cuando empiezas a calentar y en un lado de la pista ves las montañas, la mente reacciona de otra forma, y de repente das la vuelta en la curva de los 300m. y sabes que a 5 minutos andando acabas en la playa y notas como en esa última recta la brisa te llega y sientes como esta ahí.

No os voy a aburrir más contándoos lo difícil que es entrenar solo cuando estas acostumbrado a entrenar con alguien, porque los que lo habéis hecho alguna vez ya lo sabéis, y los que no, si leéis las anteriores entradas lo comprenderéis.

Si os soy totalmente sincero, los primeros días de pista me costo bastante volver a coger el ritmo y habituarme a ella, pero según avanzaban los días me sentía más y más cómodo, y empecé a exigirme más a mi mismo, sin que nadie me dijera nada, y poco a poco conseguí meter mejores tiempos, tanto en las series más cortas como en las largas, pero si es verdad que te queda esa sensación de que pudiste haber dado mucho más si alguien estuviera contigo, por que al fin y al cabo, todos los hombres somos competidores, y nos exigimos mucho más cuando hay alguien a nuestro lado.

Llego el día del test, y como si fuera el día de una gran carrera, pase la noche entre sueños de media hora, despertándome a cada instante nervioso, hasta que ya una vez comprendí que era solo un test, que aun no me jugaba nada, y aunque parezca frívolo, empecé a reírme yo solo, y así conseguí dormir lo que me quedaba de noche.

Finalmente fui a la pista acompañado por mi hermano y mi cuñada que querían darme ánimos, y la verdad es que se agradece esa sensación de compañía, pero al final el que corres eres tu.

Calenté bien, hice buena técnica y me dispuse a salir.

Al principio todo iba perfecto, hasta que me di cuenta de que iba bastante lento, y que, de seguir así, no conseguiría meterlo en tiempo. La he cagado pensaba. Pero algo distinto pasaba por mi cabeza, porque quizá en otra situación lo hubiera asimilado y no habría conseguido nada, pero esta vez no, esta vez no podía ser, me lo debía a mi mismo, y los últimos 600m. me tocó apretar tanto los dientes que no pude hacer ni el esprint final que tanto nos caracteriza a la mayoría de los corredores.

Conseguí llegar a la ansiosa meta, mire el reloj, estaba cargando, busque una sombra para poder parar, y de repente pone el tiempo…

¡Justo en tiempo! No era mi mejor tiempo ni nada por el estilo, pero me alegre mucho más que cuando lo hice mi mejor vez, porque sentía que esta vez lo había conseguido yo solo, y esa sensación es indescriptible, sentía que podía hacerlo otra vez cuando quisiera que lo iba a volver a conseguir.

Al final todo lo sufrido mereció la pena, y es que a pesar de todo, creo más en el esfuerzo y el sacrificio, que en la superstición.

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

A %d blogueros les gusta esto:
search previous next tag category expand menu location phone mail time cart zoom edit close