«Aprende a ser flexible contigo mismo, hay días en los que estas más bajo de ánimo, no te preocupes. No te sientas culpable por eso, saca días de descanso extra y vuelve a la carga, comete el mundo como sólo tú sabes. Visualiza tu objetivo. En los días más pesados del entrenamiento cuando incluso te plantees donde te has metido, piensa en el día de la competición, en la llegada, en la satisfacción de ver a los que te quieren allí, y te ayudará a superar los momentos más duros de la preparación.