Sal de tu zona de confort.
Exponte voluntariamente a situaciones incómodas.
Tú mente es más fuerte de lo que te crees, pero tendemos a mantenernos siempre en situaciones cómodas porque pensamos que ahí se encuentra realmente la seguridad, la salud o la felicidad, pero no es así.
Solo apreciarás lo que tienes cuando lo pierdas.
Solo entenderás lo que es el confort cuando pases frío.
Solo sabrás lo que es el hambre cuando realmente estes varios días sin comer.
Solo empatizarás con los demás cuando consigas ponerte en su piel.
Nos encontramos en una época de comodidad en la que lo tenemos todo al alcance de la mano, haciéndonos cada vez más vagos y débiles, más dependientes y más «enfermos».
Están más que demostrados los beneficios que producen para la salud la exposición a ambientes «extremos» (ojo, siempre con precaución y de manera progresiva) y los baños en agua fría o las duchas con agua fría pueden jugar un papel fundamental en la mejora de tu sistema inmunológico, entonces ¿por qué no exponerte a ello?
Por otro lado esta la meditación, el control de la respiración, el enfocarte y no tener una mente dispersa rodeada de miles de señales llamativas para que veas cosas absurdas y pierdas el tiempo en las redes sociales, y sí, también se han demostrado los innumerables beneficios que produce la meditación en el ser humano.
Con 5 minutos al día basta.
Entonces, ¿por qué no lo haces?
¿cuánto tiempo pasas al día en instagram o en tik tok?
¿te lo has planteado alguna vez?
¿Te has planteado alguna vez lo que cambiaría tu vida dedicándote tan solo 10′ al día a ti mismo?
Quizá pienses que es absurdo, así que, ¿por qué no lo pruebas? Haz una meditación, aunque sea guiada de 5 minutos y date una ducha con agua fría, con que este un poco más fría de lo normal es suficiente, día tras día verás que vas tolerando mejor la temperatura.
Pruébalo durante una semana, y si lo haces, pásate luego por aquí y cuéntame como estas.
Seguro que juntos podemos ayudar a más gente.